Daniel Campi y Daniel Moyano (Instituto Superior de Estudios Sociales -UNT- CONICET-, Argentina)
Un lugar común desde los debates en torno a la legislación azucarera de fines del siglo XIX ha sido definir a los propietarios de ingenios como “barones del azúcar”, caracterización que sintetizaba una supuesta naturaleza “prebendaria” y hasta “parasitaria” y que habría de proyectarse en la historiografía económica argentina hasta muy avanzado el siglo XX.
Sin embargo, los estudios que asumieron tal caracterización no fueron producto de investigaciones de base, sino más bien expresaban un juicio de valor negativo sobre gran parte del empresariado argentino, una de cuyas expresiones más palmarias habrían sido los empresarios azucareros.
Esta propuesta busca poner a prueba esa hipótesis analizando la documentación contenida en archivos de empresa (como la firma “Avellaneda y Terán”, la “Cía. Azucarera Juan Manuel Terán” y la “Cía. Azucarera Santa Lucía”), a la que se agregará fuentes hasta hoy no suficientemente consultadas (por ejemplo, los contratos conservados en el Registro Público de Comercio y los protocolos notariales del Archivo General de la Provincia de Tucumán). A partir de las mismas se indagará sobre la organización y las modalidades de gestión de las empresas, las estrategias de inversión, las políticas de financiamiento, los diferentes modos de enfrentar las oscilaciones y las crisis de mercado, la actitud frente al cambio tecnológico agrícola e industrial, etc.
Los resultados de la investigación serán útiles para aproximarnos con mayor solidez a las peculiaridades que habrían distinguido a los industriales azucareros tucumanos en el contexto del empresariado argentino y latinoamericano.